Nuestro objetivo prinipal, rescatar a los animales atrapados en los sifones.
Mi hermano se asomó al primero de ellos y gritó: Está vacío! Sin darse cuenta de que un sapo partero se encontraba al borde del mismo, y tras avisarle ,pudo cogerlo antes de que cayera dentro. Ufff! Por los pelos.
Después nos dirijimos a la Balsa de los Eslizones, enfrente de la cual, hay un sifón.
Pudimos bajar dentro, ya que no circulaba agua. En su interior, refugiándose entre el barro y las capitanas nos esperaban mas de 50 sapos corredores, 5 sapillos moteados y un tritón jaspeado.
Todos pudieron ser rescatados. Quico y yo bajamos al sifón y lo recorrimos hasta el otro lado. Y los Marios nos ayudaban a sacar la maleza y los animales desde el exterior. Trabajo en equipo!
Quico bajando a la entrada del sifón |
Sapillo moteado Pelodytes punctatus |
Tritón jaspeado Triturus marmoratus |
Fotos de la liberación en la balsa |
Tras inspeccionar los alrededores de la balsa con la esperanza de ver Ranita de san antonio (Hyla molleri) y sin hallar rastro alguno de la misma por enésima vez este año, aún tuvimos tiempo de acercarnos a las faldas del Moncayo y disfrutar de la observación de varios tritones palmeados y algún jaspeado. Y también de varios luciones (Anguis fragilis)
No soy una serpiente. Soy un lagarto amigos. (Lución) |
Y eso fué todo en una fría tarde de Mayo en la que las temperaturas llegaron a bajar de los 8ºC.
UN SALUDAZO Y HASTA LA PRÓXIMA!